Las sales de magnesio ofrecen múltiples beneficios según su tipo y forma de absorción, ya que este mineral es esencial en más de 300 reacciones bioquímicas, incluyendo la función muscular y nerviosa, el control del azúcar en sangre, la presión arterial y la salud ósea. (Gröber et al., 2015). El cloruro de magnesio es altamente soluble y facilita la digestión, además de apoyar el sistema muscular y nervioso (Volpe, 2013). El bisglicinato de magnesio, al ser quelado, mejora su absorción y es más suave para el estómago, reduciendo efectos gastrointestinales (Schuette et al., 1994). El óxido de magnesio, aunque menos biodisponible, es útil como laxante y para aliviar el estreñimiento (Firoz & Graber, 2001). Por su parte, el citrato de magnesio, con alta biodisponibilidad, es eficaz en la regulación digestiva y del sistema nervioso, siendo también empleado para mejorar la salud ósea y prevenir calambres musculares (Gröber et al., 2015).
Bibliografía: - Gröber, U., Schmidt, J., y Kisters, K. (2015). Magnesio en la prevención y la terapia. *Nutrientes*, 7(9), 8199-8226. - Schuette, SA, Lashner, BA, y Janghorbani, M. (1994). Biodisponibilidad de diglicinato de magnesio frente a óxido de magnesio en pacientes con resección ileal. *Revista de Nutrición Parenteral y Enteral*, 18(5), 430-435. - Firoz, M., y Graber, M. (2001). Biodisponibilidad de preparaciones comerciales de magnesio en EE.UU. UU. *Investigación del magnesio*, 14(4), 257-262. -Volpe, SL (2013). Magnesio en la prevención de enfermedades y la salud general. *Avances en Nutrición*, 4(3), 378S-383S.